Subscribe:

¿Cómo y cuándo poner las normas a nuestros hijos?

Los límites y las rutinas deben estar presentes en nuestro hogar desde que el niño nace. Las necesidades básicas del bebé van estructurando una serie de acciones que se repiten en el día a día. A medida que va adquiriendo nuevos comportamientos nos vamos dando cuenta de que es necesario ir poniendo límites. Así, por ejemplo, cuando empieza a desplazarse y empezamos a quitar todo lo que se le puede caer encima, también le vamos avisando del peligro y haciéndole ver que hay cosas que no puede tocar. En ocasiones lo que ocurre es que nos parece haber llegado a una situación insostenible donde todo es un caos. La casa está totalmente desordenada, los niños se comportan de manera totalmente incontrolada, cualquier incidente nos desborda... en una palabra: no podemos más. Pues bien, incluso en estos casos, es posible recuperar o instalar unas normas. Para hacerlo, dedica un tiempo a pensar qué es lo que quieres conseguir. No vale decir que deseas que los niños se porten bien; debes ser más específico y marcar objetivos que se puedan observar fácilmente: no vamos a gritar, no vamos a tirar las cosas, te vas a bañar solo, etc. Se trata de que marques claramente la norma, que todo el mundo sepa de qué estamos hablando.
• Recuerda que también es importante que no sean muchas. Elige aquellas que para ti son más importantes y empieza por ellas. Ya habrá tiempo de elegir otras. Y aunque tu casa te parezca un desastre, confía en que las cosas pueden empezar a ser diferentes. A continuación tienes un ejemplo: Las normas de casa
• Aprendo a tratar a los demás: no insulto, no pego y no grito.
• Cuando me equivoco pido perdón. • Cuido las cosas y las guardo.
• Veo la televisión y cuando acabo la apago. • Ayudo a mamá y a papá a poner y a quitar la mesa; así aprendo.
• Cuando quiero salir pido permiso.
Si te ayuda, no dudes en colocar un cartel en un lugar visible de tu casa para que todo el mundo conozca lo que debe hacer, aunque claro, eso no garantiza que se cumplan. Para conseguirlo, necesitamos práctica. Además, es imprescindible que a la norma le acompañe su consecuencia (tanto positiva como negativa). Más adelante veremos algunas maneras de hacerlo.

0 comentarios:

Publicar un comentario

¿Y tu que opinas?

¿PREGUNTAS?

Nombre

Correo electrónico *

Mensaje *